OVNIS DEL 15 DE MAYO DE 1968
LAS MENTIRAS Y MANIPULACIONES DE LOS MILITARES

¿Maquinación? ¿ Intoxicación? ¿Expedientes "maquillados"? ¿Información sesgada por parte de la Inteligencia Militar?

Más de uno verá en estas críticas a los responsables de la segunda desclasificación ovni un enfermizo afán de desprestigio de la Fuerza Aérea. Lo he mencionado e insistiré en ello hasta el aburrimiento: la misión de un investigador es procurar la verdad. Y nada ni nadie debe apartarle de ese saludable fin. Si el todo nunca puede ser juzgado por una parte, tampoco estas denuncias representan una vara de castigo al conjunto del Ejército del Aire. De hecho son muchos los militares que, abierta o confidencialmente, sabedores de mi discreción e independencia, me suministran pistas y testimonios de notable valor.

Aún así, soy consciente de que reuno un buen número de papeletas para el sorteo de la maledicencia. Pascal, el insigne filósofo y matemático francés del siglo XVII, escribió un pensamiento que asumo con todas sus consecuencias: "Decir la verdad es útil para aquel a quien se dice, pero resulta nefasto para el que la formula, puesto que se hace odiar".

Dicho esto, me esforzaré en aportar nuevas pruebas que demuestren cuanto afirmo. Es decir, que -hoy por hoy- nos hallamos ante una descarada manipulación de la mayoría de los informes oficiales sobre ovnis.

¿GLOBOS?


Mayo de 1968. Caso ovni registrado el dia 15.
El Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Aéreas Españolas vuelve a pillarse los dedos. El desliz -como veremos- tuvo su origen en la información suministrada por el señor Ballester Olmos, colaborador habitual de los militares en el proceso de desclasificación de los archivos ovni. Una información falsa...
Aunque el navegante puede consultar el expediente en esta misma sección (descargar "MATERIA RESERVADA": expedientes desclasificados 1993 - Caso MADRID-BARCELONA) he aquí los dos folios de resumen del solemne "patinazo":

Páginas de resumen y consideraciones.

Expediente desclasificado

 

 

CONSIDERACIONES

 

Pero vayamos paso a paso...
¿Qué fue lo ocurrido en la mañana de aquel 15 de Mayo de 1968? El propio general jefe del Mando de la Defensa Aérea española lo resume así, en escrito dirigido al ministro del Aire:

Informes remitidos por el Mando de la Defensa Aérea, junto a copia y original del parte de traslado de la película.

Informe

 

Comprobante de envio - copia

 

Comprobante de envío - original 

 

Recortes de prensa sobre el avistamiento

Recortes 1 - Prensa Canaria

 

Recortes 2

Recortes de prensa con la noticia del avistamiento ovni por parte del avión de Iberia que efectuaba el vuelo inaugural Canarias - Paría. Las fotocopias - incompletas y "empasteladas" - forman parte del expediente desclasificado por el Ejército del Aire.

 

Junto al significativo informe, que firma el general jefe del Mando de la Defensa Aérea española y que conviene analizar cuidadosamente, los responsables de la desclasificación adjuntan el oficio en el que se da cuenta al ministro del Aire de la entrega de la película obtenida por el pasajero del DC-9. Un oficio cuyos sellos de "entrada y salida" resultan de interés a la hora de estudiar el "peregrinaje" del film.

Honradamente, no sé por dónde empezar. Son tantas las mutilaciones y tal la desinformación introducida en este caso que no resulta fácil su esclarecimiento. Como defendía Tennyson, "una mentira que sea una gran mentira puede ser combatida inmediatamente; pero no es sencillo luchar contra una falsedad que contiene una parte de verdad". Esta, creo yo, es la "llave maestra" utilizada por el Servicio de Inteligencia del MOA para reducir a la nada el suceso del 15 de mayo de 1968.

Como habrá apreciado el navegante, en el informe oficial salta a la vista que "faltan" documentos. De acuerdo a la normativa del Ejército del Aire, cada piloto de combate -participante en un "scramble"-, el propio jefe del escuadrón y los mandos de las estaciones de radar (los EVA) estaban -y están- obligados a redactar los correspondientes atestados, proporcionando todos los datos posibles sobre la misión efectuada. Pues bien, ¿dónde están los informes del oficial controlador del Centro de Operaciones de Combate (COC) de Torrejón y del oficial de vuelos de la torre de control de dicha base aérea? Ambos, según reza el escrito del Mando de la Defensa, tomaron parte activa en la localización y visualización del extraño objeto, "formado por tres cuerpos paralelos", que sobrevoló Madrid.


¿Por qué el MOA no ha incluido en el dossier desclasificado el informe y las trazas del EVA Nº 4 ("Samba"), ubicado en el monte Paní, en Gerona? ¿Dónde están, en fin, las transcripciones de las conversaciones de los pilotos de los "cazas" con el radar? ¿Qué ha sido de los obligados "partes" que tuvieron que remitir al teniente general jefe del mencionado Mando de la Defensa Aérea? ¿Tampoco se sabe nada de la versión de los dos F-100 norteamericanos que -según Torrejón- "despegaron por orden de su Mando"? Por no mencionar los documentos elaborados en dicho Mando de la Defensa y en los que se enjuicia la película captada por el pasajero del avión de Iberia...
¿Es esto una desclasificación limpia y democrática? ¿A quién pretenden engañar? ¿Es que un caso ovni tan complejo como el del 15 de mayo de 1968 -con la participación de un radar, de, al menos, seis reactores y de varios aviones comerciales- puede quedar "reducido" a folio y medio? En el título que preside ese folio y medio, el propio Mando de la Defensa habla de "INFORMES", en plural. Pero analistas del MOA, al parecer, no han reparado en el "detalle". Y al respetar dicho encabezamiento han cometido un nuevo error. Prescindiendo, incluso, de esa minucia, cualquier ciudadano medianamente bien informado percibe al instante que los militares han ocultado la mayor parte del expediente. ¿Por qué? Si los objetos en cuestión -tanto el divisado sobre Madrid como el que provocó el despegue de los interceptores, detectado por el radar en la región catalana- eran inofensivos "globos estratosféricos" (me remito a las conclusiones del MOA), ¿qué sentido tiene la mutilación del expediente? ¿O es que no se trataba de globos meteorológicos? Analicemos este último punto.


¿"Globos estratosféricos"?

Las "consideraciones" firmadas por el oficial de Inteligencia del Mando Operativo Aéreo de Torrejón parecen contundentes. Proporciona, incluso, fechas, horas y volúmenes de los globos lanzados por los franceses y que -"presumiblemente"- provocaron los referidos avistamientos. Al leer estos razonamientos e informaciones, uno tiende a creer que el MOA ha evacuado las pertinentes consultas con el centro de lanzamiento de globos, en la localidad francesa de Aire-sur-l'Adour. He aquí otra verdad a medias. Pero no adelantemos acontecimientos.
¿Qué decía la meteorología en esa intensa mañana del 15 de mayo de 1968? ¿Pudo un globo estratosférico sobrevolar la provincia de Barcelona a tres mil pies de altitud (unos mil metros)? ¿Cómo consiguió elevarse -en minutos- por encima del techo de los "cazas" que salieron a su encuentro?

Los tenientes coroneles Rocamora (izquierda) y Bastida del Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Aéreas Españolas, responsables de la desclasificación del archivo ovni.
(Foto gentileza de Javier Sierra)

Como siempre, me remitiré al Servicio Meteorológico Nacional. En el boletín correspondiente al 15 de mayo de 1968 -número 136- los radiosondeos arrojan los siguientes datos:

"A las 00 horas (TMG), la fuerza y dirección del viento en la zona de Cataluña eran de 23 nudos y 320 grados, respectivamente, a nivel "300 milibares" [aproximadamente a diez mil metros de altitud]."

En esa misma área, el sondeo efectuado a las 12 h. proporcionó estas cifras:

"A nivel de superficie (1000 milibares), el viento (190 grados) procedía del sur, con una fuerza de 06 nudos (alrededor de 12 km./h.)."

A mayor altura -400 mb.-, el viento soplaba con dirección 340 grados y una fuerza de 33 nudos.
Que "traducido" quiere decir algo muy simple y que, por supuesto, desmonta la hipótesis de los militares del MOA:

A lo largo de esa mañana, en la región de Cataluña, los vientos en altura fueron siempre del NOROESTE, variando entre 320 y 350 grados.
En cuanto al nivel apuntado por el radar del Paní (Gerona) -tres mil pies-, los vientos, entre las 00 y las 12 horas, soplaron del noroeste (310 grados) y del sur (190 grados), con velocidades comprendidas entre los cuatro y los seis nudos.

Y estamos en lo de siempre: si el supuesto "globo" se elevó más allá del techo de los reactores -muy por encima de los l0.000 metros-, ¿por qué no fue empujado por los vientos hasta el Mediterráneo? Como hemos visto, a esos niveles, las corrientes eran superiores a los sesenta kilómetros a la hora.

Pero hay más. Si el objeto -como defiende la Sección de Inteligencia del MOA- era un globo estratosférico, ¿qué demonios hacia a mil metros del suelo (tres mil pies)? Como ya he citado, la estratosfera -al menos en Pamplona, mi tierra- comienza por encima de los veintiséis mil pies.


"Pudo sufrir un pinchazo", argumentarán los militares. Muy bien. Aceptado. En ese supuesto también deberían admitir que ningún globo que haya entrado en pérdida es capaz de remontar el vuelo y, mucho menos, a la velocidad desplegada por aquel "angelito".
Refresquemos la memoria. Si el "globo" fue detectado por el EVA 4 a tres mil pies de altura, ¿cómo explicar que en cuestión de minutos se colocara a más de 60.000? Normalmente, el tiempo medio consumido en la materialización de un "scramble" (desde que se autoriza el despegue hasta que los cazas "se van al aire", oscila entre los cinco y diez minutos. Y como deberían saber los analistas del MOA (todos han sido o son pilotos), la velocidad ascensional de un verdadero globo meteorológico difícilmente supera los veinte kilómetros por hora. Insisto: ¿a quién pretenden engañar? No existe, ni ha existido, globo estratosférico que -una vez pinchado- baje a mil metros de la superficie terrestre para situarse después a más de veinte kilómetros de altitud.

¿Y qué decir del "globo" observado al norte de Madrid?
Amén de la forma -"similar a tres cuerpos paralelos"-, desconocida para los meteorólogos, ¿cómo pudo mantenerse inmóvil? Los sondeos del Servicio Meteorológico Nacional -para la región centro y a 300 milibares (10000 metros)- fijaron las siguientes medidas:

"A las 00 horas, vientos de 22 nudos y dirección noroeste (330 grados)."
El siguiente sondeo -a las 12 h.- fue prácticamente similar:
"25 nudos y 330 grados."
Es decir, a ese nivel -unos diez mil metros-, cualquier globo habría sido arrastrado de inmediato hacia las regiones levantinas y a razón de casi 50 km./h. Por supuesto, el objeto divisado desde Madrid a las 10.30 horas (Z) difícilmente pudo desplazarse hasta la provincia de Barcelona. El viento -recordémoslo- era del noroeste. Y tampoco el segundo objeto, el "globo pinchado", tuvo oportunidad de situarse sobre la capital de España. Las corrientes -a 3000 pies- soplaban del sur (1900). En consecuencia, esa mañana del 15 de mayo de 1968, en los cielos españoles -que sepamos- se movieron dos ovnis. Perdón: dos "globos estratosféricos"...
Y a la vista de estos parámetros meteorológicos -al alcance de cualquiera que los solicite-, ¿cómo debemos enjuiciar las célebres "consideraciones" del MOA?


"Tanto el comportamiento (trayectoria y velocidad) -dice el escrito oficial- como las apreciaciones de los testigos, inducen a pensar que se trataba de globos estratosféricos."

Una de dos: o los militares que han redactado este informe son unos incompetentes -cosa que dudo- o pretenden que la opinión pública comulgue con ruedas de molino.
Pero, aunque la información meteorológica -por sí misma- es lo suficientemente clara como para demoler las ridículas y tendenciosas conclusiones de la Sección de Inteligencia, honradamente, en mi ánimo quedó flotando una duda:

"¿Y si el MOA tenía razón?"
La última parte de dichas "consideraciones" -aportando datos concretos, supuestamente procedentes del Centro de Lanzamiento de Globos, en la localidad francesa de Aire-sur-l'Adour- disfrutaba de un importante peso específico. Y naturalmente me faltó tiempo para cruzar la frontera y visitar el mencionado Centro de Lanzamiento de Globos Estratosféricos, en la región de Las Landas.

 

Serie de diapositivas de la visita de J.J. Benítez al Centro de Lanzamiento de Globos de Las Landas.

Cennes - 1

J.J. Benítez en el centro de Lanzamientos de Globos, en Las Landas (Francia).
(Foto: Blanca de Benítez)

 

Cennes - 2

Pierre Faucon: "Ningún globo francés cruzó los pirineos en aquel 15 de mayo de 1968".
(Foto: Blanca de Benítez)

 

Cennes - 3

Pierre Faucon, Director del Centro de Lanzamiento de Globos Estratosféricos Aire-sur-L'Adour, en Las Landas (Francia) -en el centro de la imagen-, explica a J.J.Benítez la imposibilidad de que los ovnis observados en España en mayo de 1968 fueran globos franceses. A la derecha, Max Baron, jefe de lanzamientos y seguridad del CNES en dicho centro.
(Foto: Blanca de Benítez)

 

 

Cennes - 4

Max Baron, jefe de lanzamientos de CNES, mostrando en pantalla el riguroso seguimiento de cada uno de los globos lanzados desde Aire-sur-L'Adour.
(Foto: Blanca de Benítez)

 

 

Cennes-5

Max Baron, jefe de lanzamientos del CNES, dibujando en la pizarra los diferentes componentes de un globo estratosférico.
(Foto: Blanca de Benítez)

 

A decir verdad, los casi setecientos kilómetros merecieron la pena. Tras una detenida gira por el moderno complejo -el único de Europa-, Pierre Faucon y Max Baron, jefe del CNES y responsable de lanzamientos, respectivamente, despejaron las incógnitas. Trataré de sintetizar sus demoledoras explicaciones:

1ª Centre National d'Etudes Spatiales (CNES), del que depende el referido Centro de Lanzamiento de Globos Estratosféricos, no tenía conocimiento -ni oficial ni extraoficial- de las alusiones del Mando Operativo Aéreo del Ejército del Aire español. Dicho de otra forma: el MOA jamás solicitó al CNES las informaciones que aparecen en los documentos firmados por el oficial de Inteligencia. Al menos, hasta el 5 de mayo de 1993, fecha de mi primera visita al CNES.
Entonces, ¿cómo obtuvieron los datos sobre los diferentes lanzamientos de globos?
Buena pregunta....

2ª El 15 de mayo de 1968 no hubo lanzamiento de globos estratosféricos. Ciertamente, el MOA no menciona esa fecha. Pero sí cita el 14: lanzamientos a las 16.21 horas, con un volumen de 53000 m.3, y a las 14.35, con 15.000 m.3

 

 

Un documento que invalida las "consideraciones" del Mando Operativo Aéreo (MOA). Procede de los archivos del CNES, en la localidad francesa de Aire-Sur-L'Adour. Se trata de la trayectoria seguida por el "Vuelo 51", el globo estratosférico lanzado el 14 de mayo de 1968 a las 16.21 horas (Z). tras alcanzar el techo (plafond) establecido -34.000 metros-, vuela hacia el Noroeste. A las 07.20 h. se efectúa la separación a unos 15 kilómetros de la costa. El instrumental desciende en paracaidas al sur de la ciudad de Dax.


Pues bien, consultados los archivos del CNES, Pierre Faucon puso en mis malévolas manos la siguiente y determinante información:


Vol Ni 51 du 14.05.68. Liezi: Aire-s/Adour
BENEFICIAJRE: Monsieur ACKERMAN-I.A.S. Bruxelles
BALLON UTILISE: 25 P 5, 57000 m3
PROGRAMME: Etudes ionosphèriques
POIDS DE L'EXPERIENCE: 9 kg. 500
POIDS TOTAL ENLEVE. 31 kg. 250
HEURE DE DEPART. 16 h. 21 TU
DUREE DE LA MONTEE: 01 h. 50
PLAFOND: 34000 mètres
DUREE DU PLAFOND: 13 h. 09
SEPARA TION à 07 h. 20
OBSERVA TIONS: Bon vol
AIRE-S/ADOUR, le 31 Mai 68 2

3ª En el sexto y último folio de la documentación referente a este vuelo, Pierre Faucon fue a mostrarme un "detalle" que arruinaba definitivamente la tesis defendida por los militares españoles:

 

Tabla de seguimiento del Vuelo 51

Seguimiento vuelo 51

Tablas del seguimiento -por radar y telemetría- del "Vuelo 51", facilitadas a J.J. Benítez por Pierre Faucon, jefe del Centro de Lanzamiento de Globos Estratosféricos de Aire-Sur-L'Adour, en Las Landas (Francia). A partir de las 07.20 horas (Z) - momento de la "separación" (Squidbage) -, puede observarse cómo el instrumental, provisto de paracaidas, va descendiendo a nivel. A las 08:23 horas se registra el último "contacto-radar" con "ASA" (Aire Sur Adour). El rumbo era 266 grados, la distancia -en línea recta- al Centro de Lanzamiento de 69 kilómetros y la altitud de 6.000 pies (unos 2.000 metros). Ocho minutos más tarde (08:31 h.), la comunicación se pierde. A las 08:47 finaliza la operación. En consecuencia, si el globo francés deja de existir como tal a las 09:47 (hora local) -probablemente mucho antes-, ¿cómo pudo aparecer sobre Cataluña a las 11 y sobre Madrid a las 11:30 horas?



"El globo estratosférico propiamente dicho, lanzado a las 16.21 h. del 14 de mayo de 1968, cayó en territorio francés. Concretamente, en las proximidades de Dax. Para ser exactos, a cinco kilómetros al sur de dicha ciudad."

La pregunta a los "linces" del MOA es elemental:
Si el globo estratosférico francés terminó su misión poco después de las 07.20 h. -a más de trescientos kilómetros de la región barcelonesa y a quinientos de Madrid-, ¿qué era el objeto captado hacia las 10 h. por el radar del Paní en la mencionada área catalana? ¿Qué fue lo observado hacia las 10.30 h. de esa misma mañana del 15 de mayo de 1968 al norte de la capital de España?

Como queda demostrado, todo menos globos estratosféricos.
En el dossier que obra en mi poder -y que está a disposición del MOA- puede observarse cómo, a través del seguimiento por radar y telemetría, los operadores del CNES controlaron en todo momento las evoluciones de aquel globo liberado en la tarde del 14 de mayo de 1968. Y de acuerdo a esa recepción de datos, el famoso "Vuelo 51" jamás abandonó el espacio aéreo galo. Repasemos la documentación oficial del CNES:

Tras una hora y cincuenta minutos de ascensión, nuestro "amigo", el globo estratosférico, alcanzó su techo a las 18.11 h. Y lo hizo a poco más de treinta kilómetros al sureste de Aire-surl'Adour. Desde allí, empujado por los vientos, tomó rumbo 280 grados (oeste), manteniéndose en el techo previsto (34.000 metros) durante trece horas y nueve minutos. Concluidas las experiencias científicas programadas, los especialistas provocaron la llamada fase de "separación". Y el instrumental que colgaba del globo descendió a la tierra, auxiliado por paracaídas. Esta "separación" -que constituye el fin del experimento- tuvo lugar a primera hora de la mañana del día siguiente, 15 de mayo: a la ya citada 07.20 (Z) y a dieciocho kilómetros al noroeste de Dax. (No confundir los puntos de caída del globo y del instrumental. El mapa confeccionado por el CNES, que incluyo para evitar suspicacias, no deja lugar a la duda: el globo de marras no cruzó la frontera española en ningún momento.)

¿Y qué ocurrió con el globo, una vez consumada la "separación"?
Los mercachifles y negadores profesionales de la Ufología pueden esgrimir que "siguió volando y que terminó colándose en España".

Pues no. Por varias razones. Según los expertos del CNES, al activar -por radio- el mecanismo de separación del instrumental, el soporte (es decir, el gran globo) es inutilizado automática y simultáneamente. Bien mediante una explosión o, lo que es más habitual, abriendo las "mangueras" que liberan el gas. Y el globo -pulverizado o deshinchado- cae a tierra. Por razones de seguridad, así está contemplado en la normativa aérea, estos gigantescos globos no podrían seguir volando sin control.

 

Informes de seguimiento y tablas de telemetría del Vuelo 50

seguimiento vuelo 50

Síntesis del desarrollo del "Vuelo 50". Como bien puede apreciarse en las "observaciones" se trató de un "buen vuelo". El globo y el instrumental cayeron en territorio francés. El MOA volvía a "equivocarse".

 

 

telemetria vuelo 50

Seguimiento telemétrico del "Vuelo 50", correspondiente al globo estratosférico lanzado desde Aire-sur-L'Adour a las 14:35 horas (Z) del 14 de mayo de 1968. La experiencia concluyó a las 02:13 h. (Z).

 

Imágenes tomadas desde el instrumental que cuelga del globo estratosférico.
A la izquierda, al alcanzar el techo, comparado con el arco del triunfo.
A la derecha, al producirse la separación, se abren los paracaidas. El instrumental científico desciende y el globo se deshincha automática y simultáneamente.
(Fotografías gentileza del CNES).

 

Además, en el caso que nos ocupa -el "Vuelo 51"-, admitiendo que esa masa de 57.000 metros cúbicos (y no 53.000 como escribe el MOA) no hubiera podido ser inutilizada o destruida en el momento establecido, los vientos existentes a 102.000 pies habrían terminado arrastrándola al interior del golfo de Vizcaya. (Véase gráfico del CNES.) De hecho, si observamos el lugar elegido para la fase de "separación", comprenderemos que dicha decisión no fue gratuita. El globo, sencillamente, estaba a quince kilómetros escasos de la costa. De haber continuado su marcha, el equipo científico podría haber descendido en el mar.

Resumiendo: si en el instante de la "separación" (07.20 h. Z) el globo estratosférico francés viajaba con rumbo 280 grados (hacia el oeste), ¿cómo pudo "aparecer" a las 10.30 h. (Z) sobre Madrid y media hora antes sobre Cataluña? Y no olvidemos que ese 15 de mayo de 1968 no hubo lanzamientos de globos...

Carta de Max Barón, certificando que el vuelo nº51 fue recuperado en la región de DAX (Francia).

Carta de Max Baron

 

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